Archivo de la etiqueta: Transporte público

UyT visita el metro de Budapest, el primero de la Europa continental

Hace un par de semanas, tuve la suerte de visitar Budapest y quería compartir algún contenido del viaje pero la verdad es que me da bastante pereza utilizar los mismos formatos que venía empleando los años anteriores para escribir los posts sobre viajes.

Por este motivo, me decidí a buscar nuevas formas de narrar algunos de los aspectos más llamativos del viaje desde el punto de vista de la movilidad y el urbanismo.

La primera que se me ocurrió fue la de comentar cuatro fotografías de espacios ubanos que me llamaron la atención. Para ello me serví de un hilo de Twitter:

La segunda, que es la que nos ocupa ahora, es una especie de reportaje fotográfico que permite mostrar algunas imágenes del metro de Budapest, el primero de la Europa continental, que me permiten esbozar algunas ideas en torno al mismo. Espero que os guste.

La línea 1 del metro de Budapest (que data de 1896) fue la primera del segundo sistema de metro subterráneo más antiguo del mundo, sólo por detrás del de Londres. Aunque, tipológicamente, hay quien defiende que se trata del primer metro del mundo porque el de Londres “era un ferrocarril enterrado”. Las estaciones tienen esta característica pinta, con el color amarillo de la línea y la particularidad de que, para acceder en el sentido que quieras moverte, es importante fijarse en el sentido de circulación de los coches porque sigue el mismo sentido. Sí, al contrario que los sistemas ferroviarios normalmente.

Para descender al andén, en palabras de mi amigo Antonio porque justo le mandé la foto el día que se conoció la noticia “hay menos escalones que entre los pisos del chalet de Pablo Iglesias”.

Esto tiene que ver con el método constructivo y, es que no se construyeron túneles sino falsos túneles que se cubrieron a lo largo de la mayor parte de su trazado (que, en buena parte discurre bajo la Avenida Andrassy). Curiosamente el nombre original de la línea fue “metropolitano del milenio”, pues se inauguró para celebrar el milenio de la llegada de las tribus magiares, que es considerado el acto fundacional de la nación húngara y la línea quedó a la vista junto a la Plaza de los Héroes que honra a los patriarcas de dichas tribus.

Por dentro, a pesar de la reforma y la sustitución del material rodante, las estaciones tienen un aspecto de lo más interesante:

Curiosamente, los planes para construir las siguiente dos líneas de metro comenzaron incluso antes de la inauguración de la primera línea, en 1895. Sin embargo, sus trazados no se decidieron hasta 1942 y la construcción de la segunda línea no se inició hasta 1950. Su inauguración estaba prevista para 1955, pero no se inauguró hasta 1970. Es decir, 74 años después de la primera… ¡Casi nada!

Las nuevas líneas tienen un aspecto muy diferente (y tracción vía tercer carril en lugar de con catenaria):

Y seguro que quienes las hayáis visitado habéis notado algo en las escaleras mecánicas jajaja.

Recordad: para no perderos nada, podéis uniros al canal de Telegram de urbanismoytransporte.com para recibir contenidos interesantes tanto del blog como de otras cuestiones relacionadas con él: https://telegram.me/urbanismoytransporte

Algunos apuntes sobre el transporte en Marruecos

Estas vacaciones he estado con mi hermano en Marruecos. Tras 1.900 km en avión, 340 km en tren, 780 km en autobús, 50 km en taxi y 217 km andando que nos han llevado a Tánger, Chefchaouen, Rabat, Casablanca, Essaouira (Mogador) y Marrakech; hemos sido testigos de algunas cuestiones referentes al transporte que me gustaría compartir por si son de utilidad para cualquiera que quiera viajar por el país. He tratado de agrupar por temáticas los apuntes que iba tomando a lo largo del viaje:

1. Es imprescindible armarse de paciencia. Principalmente, por la escasa puntualidad de los trenes y autobuses. Viaja con tiempo y procura coger siempre la penúltima combinación por si la pierdes tener una segunda oportunidad. Pero también por lo complicado que resulta informarse en las estaciones. Apenas hay información en paneles, en los andenes/dársenas ni en el exterior de los vehículos pero, a cambio, suele haber mucho personal. Pregúntales siempre que dudes y antes de montarte en cualquier vehículo. La única vez que no lo hicimos, porque nos tocó llegar a la carrera, nos montamos en un tren que no era el que queríamos coger porque no era el que anunciaban los paneles de señalización variable y nos tocó recular.

2. En las estaciones de autobús y de tren se pueden comprar los billetes de antemano. También supuestamente por internet, pero la verdad es que las webs no nos funcionaron en ninguno de los intentos en CTM (la compañía nacional de buses) y ONCF (la compañía nacional de trenes).

3. En los buses, el equipaje se factura porque hay personal encargado de su vigilancia. Se paga justo antes de coger el bus, por lo que hay que llegar con holgura suficiente. Al menos en las de CTM y Supratours, que son las que cogimos (quizá en las demás no, pero siempre es mejor tenerlo en cuenta por si las moscas). La segunda sin querer, porque en un trayecto que compramos para hacer en tren no había línea ferroviaria para hacer el itinerario completo y había que trasbordar. La conclusión a la que llegamos después es que ONCF y Supratours deben tener un acuerdo porque siempre se combinan en estos casos.

4. En algunas ciudades, CTM tiene estaciones propias, aparte de las del resto de compañías. Son más tranquilas y seguras pero más difíciles de encontrar. Aunque las he buscado en Google Maps, sigo sin tener muy claro que sean por las que pasamos. Nosotros fuimos siempre a las normales porque es donde te solía indicar la gente (los pocos que sabían dónde estaban las cosas. Segunda cuestión con la que armarse de paciencia).

5. Los taxis son una forma muy común de transporte en Marruecos. Hay dos tipos: 1) los Grand Taxi, en los que se pacta el precio al inicio de la carrera y en los que se suele viajar con otra gente porque los conductores van parando a recoger a cualquiera que los pida si el destino coincide (así, cada uno paga la carrera por separado y el taxista gana más), y 2) los Petit Taxi, coches más pequeños que ponen un contador para verificar el precio de la carrera. Se distinguen por su tamaño y también por su color (los Grand Taxi son color marfil en todas las ciudades y los Petit Taxi son de diferentes colores, según la ciudad). Sin embargo, la realidad es que, en los Petit Taxi, la mitad de las veces cuando les adviertes que pongan el contador (diciendo “kontor”), no te hacen ni caso y tratan de estafarte con una facilidad pasmosa, tratando de pactar precios como si fueran Grand Taxi.

Grand Taxis en Marrakech
Petit Taxis en Casablanca

En Essaouira hay muy pocos Grand Taxi y muchos Petit Taxi con una «tarifa fija» de 5 dirhams por persona y desplazamiento, un precio más que razonable. Nada que ver con los taxistas del resto de ciudades que visitamos. También hay taxis tirados por caballos pero sólo vimos en ellos a locales, por lo que no los cogimos.

Pondré tres ejemplos de malas experiencias en taxis para que andéis prevenidos o, al menos, sepáis lo que hay:

– El primer taxi que nos llevó desde el aeropuerto de Tánger hasta la ciudad, nos dejó en un hotel que no era el nuestro porque tenía un nombre que al taxista le sonaba similar. Cuando le dijimos que nos llevara al otro, se negó porque decía que ya estábamos cerca y él se volvía al aeropuerto y encima después “le faltaban 10 dirhams para darnos el cambio completo”. Estábamos a unos 15 minutos andando pero, dentro de lo malo, habíamos un precio inferior al que vimos que era el aproximado entre el aeropuerto y la ciudad…

– En Casablanca, después de una negociación durísima con varios taxistas de Petit Taxi que se negaban a ponernos el contador porque “éramos turistas y queríamos ir entre dos sitios turísticos”, conseguimos que uno nos llevara a un precio razonable desde la mezquita de Hassan II (el único monumento bonito que tiene la ciudad) hasta la playa (que está bastante bien). A la vuelta, tratando de evitar que nos volvieran a poner pegas, preguntamos a un chaval local más o menos de mi edad. Craso error. Resulta que en verano, los taxistas no cogen a los locales porque prefieren llevar sólo a turistas para jugársela. Resultado: 8 kilómetros andando hasta el hotel con el único consuelo de que el chaval era bastante majo y terminamos agregándonos a Facebook para seguir en contacto.

– Como digo, a veces los taxistas recogen viajeros aunque vayan ocupados, por lo que puedes estar en él y que pare a ver si coge gente. No los cogen si no les conviene el destino, pero parar paran y mucho. Si llevas prisa, dilo o pueden no ir directos por si cogen a más gente. Eso nos pasó en Casablanca para ir desde el hotel hasta Gare des Voyageurs (una de las dos estaciones de tren junto a Gare de Casa Port). Cuando quedaban 30 minutos para que saliera el tren, le tuvimos que decir que seguíamos al lado del hotel y que por favor dejara de darnos vueltas. No dejéis de decirlo. Eso sí, al final el tren salió tarde y estuvimos casi 40 minutos esperando…

6. En la mayoría de las ciudades en las que estuvimos hay buses urbanos pero bastante viejos, con una red confusa y van hasta arriba de gente (algunos, como en Casablanca, con gente agarrada en las puertas. Seguramente, por culpa de los taxistas y su ansia por estafar). Sólo parecía tener un buen servicio Tánger. Sin embargo, no cogimos ninguno porque la falta de información era tal que resultaba imposible (y no será por no haberlo intentado).

Petit Taxi y midibús en Tánger

7. Rabat y Casablanca tienen tranvía. Conectan las estaciones de bus y tren con el centro pero no están 100% cerca de todas las estaciones. Por ejemplo, en Rabat, tuvimos que andar unos 20 minutos entre la estación de bus y la más cercana de tranvía. Eso sí, con el gusto de los taxistas por la estafa, te ahorras casi 90 dirhams para llegar a la medina porque te piden 100 y dos billetes sencillos nos salieron por 12 dirhams. Vamos, que el billete sencillo son 6 dirhams. En Casablanca el billete sencillo son 7 dirhams pero también hay unas tarjetas monedero con las que sale más barato. No sé lo que cuestan porque en los alrededores de las estaciones te las encuentras por todas partes y me agencié una en cuanto pude.

Tranvía de Rabat

8. Cruzar es un deporte de riesgo. Procura juntarte con locales que crucen a la vez porque lo hacen con decisión y puedes aprovechar según cruzan porque los coches paran. Sigue su velocidad para evitar quedarte en medio de la calzada sin opción de seguir cruzando. Más interesante aún es juntarte a grupos. Cuando hay una masa crítica suficiente, se cruza con mayor seguridad.

9. Curiosamente, en las ciudades hay semáforos en la entrada a las glorietas pero no en la salida. ¿El motivo? Evitar los atascos. ¿El resultado? Puedes empezar a cruzar convencido de que tienes prioridad y ver que en el sentido contrario los conductores no paran. Ten cuidado porque, al volante, la mayoría de ellos son auténticos animales.

10. Llama la atención la buena calidad de la red de carreteras (en gran medida de peaje, lo cual lo explica, claro) frente a la pobre red ferroviaria. Aún con eso, vimos un tren de mercancías de 54 vagón-tolva. Más largo que los que circulan por España, vaya…

11. Los buses de Supratours y CTM son Irizar en un estado de mantenimiento y limpieza razonable. Las otras compañías tienen carracas que no sabes ni cómo andan (y suelen llevar el motor al aire para que respire).

Bus de CTM. Sé que está movida pero no hice más… Estaba de vacaciones y eran las 6:00 de la mañana, bastante que no se me olvidó respirar…

12. Por su parte, el material rodante ferroviario es mayoritariamente de Alstom tanto en los tranvías como en ONCF. Los tranvías están nuevos, pero los trenes dan auténtica lástima y están bastante sucios. Además, en algunos el baño no funciona, por lo que no se puede usar, pero oler sí que huelen…

Estación de tren de Rabat

13. En Essaouira se monta muchísimo en bici. De hecho, se ven personas de toda condición y edad moviéndose en ellas. Son siempre bicis privadas. Donde se ven también bicis privadas pero en bastante menor medida es en Marrakech. Curiosamente, allí tienen también un sistema de préstamo de bicicleta pública. Sin embargo, en ningún momento vimos a nadie usándolas, sólo las vimos en las estaciones.

Servicio de préstamo de bicicleta pública en Marrakech

14. En los vehículos que tengan cinturón de seguridad, póntelo. No es el lugar en el que he visto más imprudencias al volante (de momento, ese dudoso mérito lo tiene Líbano para mí), pero no se conduce precisamente bien.

15. Si te pierdes andando, ten cuidado, porque hay gente que te hace de guía aunque no se lo pidas para después pedirte dinero (algunos, incluso, increpándote). Lo mejor es seguir andando o desandar el camino hasta un sitio concurrido y ahí preguntar a algún dependiente de tienda.

16. En las medinas y en Marrakech en general, cuidado con las motos. Aunque no es lo más común, algunos idiotas van por lugares peatonales como igual que si estuvieran en la calzada pero sorteando a los peatones. Que pase tanto en Marrakech es uno de los motivos junto a ser un parque temático de cartón piedra y lo pesados que son los locales (en el fondo, es por culpa de que sea sólo un escenario 100% orientado hacia el turismo), que me llevan a pensar que es el lugar más infame que he visitado en toda mi vida.

17. En Essaouira y Chefchaouen, que son sitios pequeños, hay espacios estanciales de bastante calidad y, aunque se echa en falta un poco de vegetación, los locales (y, sobre todo, los niños) los aprovechan bastante.

Niños jugando con agua en una plaza de Chefchaouen

NOTA: echadle un ojo a los comentarios. Algunos lectores pueden aportar también algunas experiencias interesantes que os pueden ayudar para vuestros viajes.

De paso por Varsovia: algunas reflexiones sobre el urbanismo y la movilidad de la ciudad

Hoy toca continuar con la serie de contenidos de viajes. Este post lo he pospuesto varios meses. De hecho, estuve por Varsovia hace ya más de tres meses… Pero, por unas cosas o por otras, lo he ido dejando y ya no tengo tan presente todo lo que me hubiera gustado contar, de modo que el artículo no será nada detallado (como sí he hecho en otras ocasiones) sino que serán unas pequeñas notas que tomé al respecto:

1. Varsovia es la capital y la ciudad más grande de Polonia y, su población, por encima de 1,7 millones de habitantes (casi 2,8 millones de habitantes en el área metropolitana), la convierte en la novena ciudad más poblada de la Unión Europea. Sin embargo, su configuración “en varios módulos” (Centrum, centro urbano tradicional, ribera del Vístula, barrio de Praga –lo único que quedó en pie de la ciudad tras la IIGM–) y la amabilidad de la mayor parte de la ciudad hacen que dé imagen de ciudad pequeña, cercana,… Eso sí, llama muchísimo la atención que en un minuto caminando, cambias de calle y a veces parece que cambiaras de ciudad porque pasas de zonas con parques, patios centrales y prioridad peatonal a calles 100% diseñadas como autovías y que son completamente hostiles. Digamos que, como las que hay en todas las ciudades grandes europeas, pero sin esa transición entre tramas tan diferentes que suele haber. Bueno, eso y la grandísima extensión que la hace inabarcable caminando. Supongo que son cosas de la planicie…

Varsovia
Vista de Varsovia desde el Palacio de la Cultura y la Ciencia (Pałac Kultury i Nauki). A lo lejos todas las montañas polacas (hay que leerlo con tono irónico)

2. La movilidad peatonal es peculiar en el entorno de Centrum, donde no existen cruces en superficie, sino que se realizan en galerías que, si bien tenían una accesibilidad muy reducida, es bien cierto que resultan muy animadas, están bien iluminadas, están llenas de un comercio que funciona francamente bien, están vigiladas por la noche,… Nada que ver con los subterráneos que solemos tener en España. Y, pensando en cómo puede ser el invierno en Varsovia (en abril íbamos todos en abrigo. Aunque nos los quitamos en algún momento), es posible que sean lugares que resulten muy útiles para resguardarse.

Varsovia
Entrada a uno de los pasos subterráneos. En este caso, en Cracovia (no me di cuenta de hacer la foto en Varsovia ni tengo fotos del interior)

Nota: si sois nuevos en Varsovia, tenéis el hotel por esta zona y llegáis de noche, ni se os ocurra cruzar en superficie. En nuestro caso, casi perdimos un miembro del equipo porque los conductores ¡aceleraban al verle cruzar! Y, vamos, sin acelerar ya iban a toda pastilla…

3. La bici es casi residual en algunas zonas de la ciudad aunque hay préstamo de bicis, infraestructura y unas estaciones para que te arregles la bici (ver foto). En otras, sobre todo la zona universitaria, la impresión es bien distinta y se ven bastantes.

Varsovia
Estación de arreglo de bicis frente a la Biblioteca Central de la Universidad de Varsovia

4. El aire soviético de la ciudad nueva es evidente (no en vano, el pacto de los países del Bloque del Este se firmó allí), sobre todo en lo alienante de las proporciones de calles y plazas. Basten estos ejemplos:

Varsovia
Biblioteca Central de la Universidad de Varsovia
Varsovia
Vista de la Plac Defilad (Plaza de los Desfiles) desde el último piso del hotel Marriott, con el «bonito» regalo de Stalin, omnipresente en la ciudad de Varsovia y que sirvió como ensayo para las Siete Hermanas de Moscú (pinchad en el enlace, que no tiene desperdicio) y fue, por tanto, uno de los primeros rascacielos europeos. En el fondo de la plaza (cuyas aristas se tardan en recorrer más de un cuarto de hora), el corredor donde se hacían/¿hacen? los desfilen militares.

5. A Varsovia fui precisamente a hablar de temas de transporte, al TRA2016. El congreso era en el Stadion Narodowy w Warszawie. Es decir, en la margen contraria del Vístula en la que nos alojábamos. Una vez fuimos andando y se tarda en cruzar casi una hora (impresionante la longitud de la estructura). También fuimos en autobús, tranvía y “cercanías” y sólo cabe decir lo bien que funciona el transporte público de la ciudad, con unas frecuencias realmente competitivas, plataformas reservadas en casi toda la ciudad (si alguna ventaja tiene el hecho de tenerla que reconstruir completa hace 70 años es que se podían plantear soluciones que exigen mucho espacio). Dejo por un lado un par de imágenes curiosas del intenso uso de estas plataformas reservadas que usan autobuses, tranvías y ambulancias:

Varsovia
Tranvía + bus+ tranvía pasando juntos por una estación situada en la plataforma reservada central de una calle de Varsovia
Varsovia
Puente sobre el río Vístula, con una plataforma central para tranvías y buses que es un paso continuo de transporte público. A los lados, pero fuera de la estructura, pasan el metro y el «cercanías»

Y, por otro, dejo el folleto del proyecto que iba a presentar (pinchad sobre la imagen):

Varsovia


BONUS

Aparte de estar esa semana de congreso en Varsovia, mis compañeros y yo aprovechamos para visitar Cracovia (en polaco, Kraków) y Dánzig (en polaco: Gdańsk, en casubio: Gduńsk y en alemán: Danzig). Las dos ciudades merecen mucho la pena. La primera, aunque tiene una de las catedrales más feas que he visto en mi vida, es una ciudad animadísima, preciosa, interesante y muy agradable (despedidas de soltero aparte. Pero eso pasa habitualmente. Si no, que se lo digan a Salamanca, Madrid, Barcelona,…). La segunda es una mezcla muy peculiar entre lo polaco, lo alemán y lo báltico, es evidente que fue un rico centro de intercambio cultural, ideológico y económico y es, además, la cuna de dos acontecimientos históricos de gran trascendencia: el inicio de la IIGM y el levantamiento polaco contra el régimen comunista.

Varsovia
Plaza del Mercado de Cracovia
Varsovia
Długie Pobrzeże (Puente largo de Dánzig)

A ambas ciudades fuimos desde Varsovia en tren. A una un sábado y a la otra un domingo, aprovechando los billetes de fin de semana de los trenes de alta velocidad. Así, recorrernos el país nos resultó súperbarato (37€ el billete como tal y unos 5€ la ida y vuelta de cada trayecto porque el sistema de venta es un poco complejo y se cogen por separado los billetes y las “reservas de asiento”. Es decir, como a 47€ unos 1.300 km), rápido y comodísimo (por ejemplo, te regalan agua o bebidas calientes, que van repartiendo un par de veces a lo largo del trayecto y limpian los baños cada media hora, lo que hace que estén impolutos). Me llamó la atención la buena calidad de la infraestructura ferroviaria, aunque hay pasos a nivel en líneas de alta velocidad (cuya velocidad es algo inferior a la de nuestras LAVs. Eso sí, puntuales al máximo) y que no haya cerramientos en las vías.

Billetes de tren del fin de semana
Billetes de tren del fin de semana

Recordad: para no perderos nada, podéis uniros a nuestro canal de Telegram para recibir contenidos interesantes tanto del blog como de otros lugares: https://telegram.me/urbanismoytransporte

Recopilación de noticias de mayo de 2016

Para la recopilación de este mes he pensado en experimentar un nuevo formato, del que seguramente me arrepienta el día que cierre Twitter, pero ¡esperemos que no sea antes del mes que viene! Este formato consiste en pegar por aquí unos cuantos tuits destacados del mes. Allá van:

1. Streetmix.

2. Moverte en transporte público ahorra mucho dinero. 

3. ¿Es necesario duplicar la A-1?

4. La queja de este mes. Así se aparca en Batán…

5. ¿Cuánto contaminará el coche eléctrico?

6. Resumen del Paseo de Jane 2016.

7. Renfe contestando como es debido. Me alegro. Igual que digo lo que no me gusta, digo lo que sí.

8. Tunel Energy.

9. Resumen de #CiViNETatwork

Tenéis aquí la presentación que usé:

10. Vehículos clásicos de la EMT por Madrid (y la semana que viene habrá sorpresas porque es la 1ª semana de la EMT)

11. ¿Quieres que el Paseo de Extremadura sea de verdad un paseo? (de este tema ya hablaré más adelante por aquí o por ecomovilidad.net)

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

Hace poco estuve en Barcelona y, como viene siendo habitual, la visita me ha dado ideas para ampliar el apartado de viajes del blog.  Así que, aquí van unas pinceladas con los 7 aspectos que me han parecido más llamativos de Barcelona en materia de urbanismo y transporte:

1. Red de transporte público

La red de transporte público es muy extensa, bastante compleja (no lo digo como crítica, pasa en toda gran ciudad) y con una cobertura muy alta.

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona
(Y eso que aquí faltan los buses, tanto los de la red ortogonal como los “normales”)

Pero en este último sentido, cabe destacar un detalle que llama mucho la atención: esta cobertura, que se maximiza en los accesos, es a costa de que éstos se sitúan relativamente lejos de los andenes y que los andenes de varias líneas se sitúen en la mayoría de los casos en “estaciones separadas” con unos tiempos de transbordo muy elevados (al menos para los estándares de otras redes de metro europeas). Para muestra, un botón:

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

Y también es una red con bastante accesibilidad (aunque imagino que en el metro y los trenes de FCG y Rodalies los transbordos desincentivarán de todas todas usar el metro como vayas muy cargado, en silla de ruedas, con carritos de bebé, etc).

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

Otro aspecto que llama la atención echando un ojo a la red de transporte metropolitano es que parece que Barcelona funciona como un continuo urbano con sus municipios limítrofes. Quizá no al nivel de Bilbao, pero sí mucho más que Madrid.

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

2. Movilidad ciclista

Sorprende mucho la cantidad de bicis que se ven por la calle y la calidad de la infraestructura ciclista: diferentes tipologías de carril bici en la acera, en calles calmadas, en calzadas e incluso en el centro de algunas grandes avenidas, destacando una solución que me sorprendió mucho en Marina con Meridiana. Además, hay muchísimos aparcabicis y ¡se usan!

Glorieta ciclista y carril en el centro de la calzada en Marina con Meridiana
Glorieta ciclista y carril en el centro de la calzada en Marina con Meridiana

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

3. Todo lo que tenga ruedas sirve para desplazarse

Impresionante la variedad de vehículos que se pueden ver (muchos de tracción eléctrica)

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

4. Carteles peatonales

Hay algo que como peatón siempre me molesta y es confundirme de sentido en las calles y estar buscando un número concreto de la calle, comenzar a recorrerla y tenerme que dar la vuelta. En este sentido, Barcelona tiene unos cartelitos muy útiles que indican los números de la calle en uno y otro sentido, de modo que apoyan la decisión de cómo dirigirse a una dirección concreta. Y también están bastante trabajados los itinerarios peatonales con señales horizontales (por ejemplo para indicar las líneas de autobús) y verticales.

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

5. El damero de L’Eixample

Debo decir que en este viaje cambié un poco mi visión sobre el damero de L’Eixample porque la frustración del achaflanado como peatón es elevada porque se rompe completamente la continuidad de los itinerarios peatonales. A cambio, genera un callejero muy sencillo de memorizar, una sección muy paseable (las aceras son muy anchas y en varios casos hay bulevares centrales bastante agradables y con unos pasos de peatones muy bien resueltos que no exigen el cruce en L) y una anchura de las calles que permite muchísimas configuraciones. Hoy por hoy, la mayoría actúan como autovías, pero las reformas futuras desde luego no van a estar condicionadas por la escasez de espacio: caben carriles bici, carriles reservados para autobuses, tranvías… (de hecho, la reciente red ortogonal aprovecha esta configuración del callejero).

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

Un detalle en el que nunca me había fijado es en la transición entre el callejero anterior al s. XIX y el del ensanche y debo decir que desde el punto de vista urbano es un caso muy interesante, destacando la solución de la Plaza de Cataluña.

6. Una línea de metro automática y muy profunda

Como fui en avión a la Terminal 1, tenía la excusa perfecta para probar la recientemente inaugurada L9sud que llega hasta ella y así lo hice. La línea es automática y la verdad es que funciona francamente bien y las frecuencias son adecuadas. Sin embargo sí que hay dos elementos extraños: en primer lugar, el trazado, que da unas vueltas un poco extrañas (aunque, bueno, la L3 y las líneas de tranvía también. Lo podéis ver en el plano de la primera imagen del post); la segunda es que los trenes circulan en ambos sentidos en parte del trazado y hay que reconocer que desconcierta un poco si no lo sabes de antemano (sobre todo si haces el transbordo en Collblanc donde, por cierto, para transbordar a la L5 hay que subir nada menos que 9 tramos de escaleras mecánicas).

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona

7. Sectorización de los distritos e incluso de los barrios

Algo que se nota muchísimo en Barcelona es el cambio entre distritos y barrios: una trama urbana radicalmente diferente, que se distingue a pie de calle, con elementos completamente diferenciados que condicionan los usos. Y, es que, aunque toda la ciudad esté gentrificada y a la vez volcada hacia los usos turísticos, resultan evidentes los contrastes entre los barrios puramente residenciales, los espacios comerciales, los espacios característicos, los polos de actividad terciaria…

Y una de estas especializaciones, para mí la más grave, es la provocada por la Ronda Litoral, que rompe completamente la conexión de la ciudad con el frente marítimo, generando una especie de no-espacio que sólo es útil para el paseo turístico (y ni siquiera) y donde no me extraña que los habitantes locales vuelquen su frustración.

Los 7 aspectos más llamativos del urbanismo y transporte de Barcelona